jueves, 18 de marzo de 2010

Carta de Agustina

A lo largo de los meses que lleva de vida este blog me pregunte muchas veces cual iba a ser su fin... si siempre iba a permanecer hablando de Abuso Sexual o si iba a poder ser lo suficientemente flexible como para poder representar a la vida misma en su máxima expresión y en una de sus mas marcadas características... todo tiene relación...
Tuve oportunidad de hablar con mucha gente que vivió cosas diferentes, y de comprobar con mis propios ojos muchas cosas terribles y siempre sentí que comprendía lo que sentían... por mas que se tratara en muchos casos de problemas aparentemente lejanos al Abuso Sexual, entonces pude comprender que toda situación de opresión se vive de una forma personal y particular, cada persona explota por donde puede y las consecuencias de lo vivido se imprimen con colores únicos en cada uno, pero mas allá de eso es parte de vivir el comprender que cada situación tiene un punto de comparación... y tanto yo como cualquiera de las personas que leen este blog y han vivido una situación traumática, cualquiera sea ella, directa o indirecta, abuso sexual, violencia de genero, violencia domestica, discriminación racial y/o cultural, hasta descuidos ajenos provenientes de la ignorancia del no hablar, sabemos que en todo esto hay un mismo ambiente... un mismo aroma... muchos tuvimos las mismas horribles ideas sobre nosotros mismos... es cierto que ya somos muchos los que, alguna vez nos sentimos dominados por el silencio... entonces me pregunte... ¿ que vamos a hacer si todos sufrimos mal que mal el mismo dolor ?... seria justo que si yo entiendo y me planteo estas cosas me ate en el blog solo a hablar sobre abuso sexual?... llegue a la conclusión de que no... conozco el aroma de el silencio, y hace mucho que decidí desterrarlo de mi vida... esta claro que lo mas nos atañe quizás sea el A.S.I. pero si solo atara a "Que nadie se entere" a hablar sobre Abuso Sexual Infantil no estaría respetando la única regla que le puse cuando lo hice... que sea "un espacio contra el silencio"

Lo que quiero compartir con ustedes a continuación es lo que tiene para contar Agustina, que tanto ha ayudado con el blog, y es importante que lo leamos totalmente sueltos de prejuicios, aboquemos esta carta a la autorreflexión y comprendamos que tan poco se habla sobre la relación de el niño con el sexo en nuestra sociedad que muchas veces se pueden cometer errores desde la ignorancia que nos deja el tabú, también en este caso no quisiera decir mas que esto, ya que también Agustina se hace comprender muy bien por esto solo eso quisiera agregar, leamos sueltos de prejuicios y librémonos hacia la autorreflexión...


Matías

m.marques.monteiro@gmail.com






Bueno, yo soy Agustina, no soy victima de A.S.I., pero les paso a comentar lo que a mi me paso.
Cuando tenia 8 o 9 años, bien no recuerdo, dormía en un dormitorio enfrente del de mis padres, y una noche al salir de mi pieza me encuentro con la puerta de su pieza abierta y ellos teniendo relaciones sexuales, inmediatamente sin que me vean, volví a mi pieza. no recuerdo que hice luego, pero fue algo que me traumo bastante .Me quedo muy grabada la imagen y los sonidos , y mas que nada fue eso lo que me volvía loca, el sonido, el jadeo. Desde allí le tenía pánico a las noches, no me podía dormir porque donde estaba escuchaba esos sonidos. Recuerdo que para dormirme me tapaba los oídos con la almohada y lo escuchaba igual…entonces me cantaba para dormir. También me acuerdo que una de esas noches explote, no aguantaba mas, no quería llorar mas encerrada en mi pieza, y Salí de mi habitación y me encerré en el baño, el llanto despierta a mi mama, quien me va a buscar y me dice que no llore mas, que por que lloraba así, que parara y me vaya a dormir. Así fue que mi cabeza entendió que no tenia que llorar por eso, así fue que peor me hizo, porque creía que era una entupida, encima que con el tiempo me fui dando cuenta que los sonidos los seguía generando mi cabeza, no era que mis padres tenían relaciones todas las noches.
Al crecer iba notando que esa situación, tener relaciones sexuales, formaba parte de la vida de las personas, y entonces, ¿quien me aceptaría si yo de repente no podía mirar ninguna escena por televisión o mismo, tener relaciones? Odie mi cuerpo, mi forma de ser, las películas, como “american pie”, “scary movie”, films muy de moda que los veían la mayoría de los adolescentes, menos yo, porque tienen escenas que me ponían muy nerviosa. Tenia mucho miedo a relacionarme con un chico, darle un beso, luego la sociedad me fue llevando a hacer esas cosas, que no quería, sino me quedaba afuera, es mas me acuerdo de haber replanteado acerca de mis inclinaciones sexuales, al no querer ni acercarme a un chico. Calle mucho tiempo esto, pero al hablarlo, cuando lo pude decir como podía, ahí fue cambiando de a poco, fui tomando esto que me paso como algo que realmente me trababa y me ponía mal, algo que lo tenia que solucionar. Y el tiempo me hizo dar cuenta también que uno nunca esta solo, que las cosas se pueden hablar y hay personas, pocas persona, pero las hay, que saben escuchar y entenderte. Siempre hay algo allá afuera que sorprende y da fuerzas hoy es increíble para mi que tenga novio, un compañero, y nos respetemos el uno al otro, mas allá de las consecuencias de un trauma.
A veces pienso, en como te puede shoquear tanto una escena así, estar en medio de algo que no te gusta, te hace mal, pero no sabes que hacer, pensas que sos un entupido si te pasa eso. Estar obligado al silencio. Entonces te lo guardas, pero resulta ser que nadie es omnipotente, y que todo lo que le hace mal a uno, con la única condición de que hace mal, ya es digno de ser escuchado y poder hablarlo, lo que sea, con la persona en quien mas confíes.
Es mas, para mi es medio irónico estar diciendo esto ultimo, ya que dude mucho en escribir esto, pero bueno le di la importancia que le debe dar cada uno a su historia. Quizás esto que escribí le sirva a alguien, quizás no, pero yo ya no callo mas. Y lo mismo deseo que haga la persona que lea esto y tenga lo suyo para contar.

Perdón por la espantosa redacción, así salió



Dejemos de mirar para un costado, o peor aún, hacia abajo.
Este es el espacio para poder empezar a cambiar las cosas.


Agustina

1 comentario:

  1. Bueno, parece que todos dejan escrita su experiencia para aportarla como granito de arena por la causa... Voy a contar la mía para aportar...
    Me considero víctima de un tipo leve de A.S.I, porque el abuso no incluyó mis genitales, sólo la boca. Paso a contar cómo fue y etcétera etcétera..

    Cuando tenía 5 años, yo, mi hermano más grande, y mi mamá, viajábamos con destino a buenos aires desde córdoba, y lo hacíamos en tren... Supongo que mi mamá eligió el tren porque era más barato, la verdad es que nunca le pregunté, pero conociéndola supongo que era por eso...
    Todos sabemos que el viaje en tren es más barato, pero demora mucho más que el colectivo y viaja gente de todo tipo y color...
    Bueno, en colectivo también viaja gente de todo tipo y color, pero supongo que se entiende a qué me refiero...

    En un momento mi hermano me invita a ir al baño y yo lo sigo. Él entra, hace pipí, y cuando él termina y sale del baño, yo recién estoy empezando, y por la puerta entra en ese momento un individuo que por lo que recuerdo era estilo rockero, porque tenía barba, melena y pantalón vaquero todo roto...

    Cuando termino y me dispongo a salir, me agarra del hombro el tipo , y con sus genitales fuera del pantalón empuja mi cabeja hacia éstos... Como yo me niego haciendo fuerza en dirección contraria con mi cabeza, baja su cabeza y pone su boca en mi boca, introduciendo su lengua y moviéndola en todas las direcciones... Paso seguido hago fuerza para sacar su cara de mi cara y afortunadamente me deja ir...

    Ni bien salgo del baño, voy al asiento con mi mamá y mi hermano, me siento del lado de la ventanilla abierta y empiezo a escupir repetidamente para sacarme ese horrible gusto que me había quedado en la boca, y me quedo con la cabeza media salida por la ventana, con la boca abierta, avergonzado hasta el extremo de lo que me había pasado, y sintiéndome encima culpable. Me daba terror el solo hecho de contarle a mi mamá y más todavía a mi hermano lo que me había hecho ese hombre.

    Bueno, básicamente eso fue todo lo que ocurrió (no me extiendo más por razones de espacio) y me quedó marcado a fuego, nunca me olvidé y siempre me dio miedo contarlo. Obviamente marcó mi forma de ser hasta incluso en la adolescencia, tiempo en el cual ni siquiera tuve novia...

    Cuando cumplí 19 o 20 me invitaron a hacer un curso de meditación y casi que me negué a ir, pero como era un compañero muy confidente el que me invitaba, al final desistí en mi negativa y fuí. Duró 10 días el curso. Al quinto o sexto día casi salgo corriendo porque no aguantaba más tanto silencio y esfuerzo mental, pero la imagen de mi compañero en mi mente me mantuvo en el curso, a regañadientes, hasta el último día...
    Al final terminé haciendo ese curso y varios más del mismo tipo de meditación...
    La verdad nunca practiqué otro tipo de meditación como zen o meditación trascendental, pero esta que practiqué, que se llama vipassana, me hizo adquirir todo el conocimiento de mí mismo que necesitaba para estar en cualquier lugar y tener la certeza de estar a salvo y sin temores. Obvio que los días de soledad y meditación en esos cursos no me dejaron sólo confianza en mí mismo, digamos que si uno vá con intenciones de ahondar en la mente o con el fin que se proponga, de seguro lo logra... Para todo cambio personal se necesita empeño, y voluntad de asincerarse con uno mismo en silencio...

    Bueno, acá dejé asentada la experiencia más chocante y con más repercución en mi vida,y también cómo sin buscarlo me topé con una herramienta para tratar con mi mente, con mi pasado, con mis miedos, con mi orgullo, etcétera, en silencio...

    Aclaración, soy varón, y afortunadamente sigo siéndolo, a pesar de que mi abusador era varón y de que a esa edad podría haberme trastornado al punto de hacerme homosexual o sátiro reprimido...
    Sí, admito, replanteé mi inclinación sexual como a los 13 o 14 años, pero por suerte quedé siendo siempre hétero.

    Espero sirva de algo éste, mi granito de arena.

    Saludos...

    cacher20.

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